Vendaje Neuromuscular
¿Qué es?
El vendaje neuromuscular o kinesiotaping es una técnica de vendaje que implica colocar tiras de cinta especial en el cuerpo del usuario en direcciones específicas para ayudar a mejorar su movilidad y apoyar sus articulaciones, músculos y tendones. También se utiliza como método de rehabilitación para tratar diferentes tipos de dolencias y patologías. Se utiliza una venda elástica, transpirable y ligera, de hilo de algodón trenzado en forma de cinta, llamada tape kinesiológico, la cual viene provista en una de sus caras de un adhesivo hipoalergénico para adherirse a la piel de la zona a tratar, ayudando a la función muscular sin limitar los movimientos, manteniendo una adecuada circulación sanguínea y linfática de la zona del cuerpo lesionada.
A pesar de que no hace muchos años que se popularizó, su origen data de la década de los 70 en Japón. El doctor Kenzo Kase lo creó para permitir un movimiento natural y una mejor circulación sanguínea en las zonas lesionadas. De esta manera se favorece la curación natural del cuerpo. Esta técnica se basa en conceptos de kinesiología y fisioterapia para tratar patologías musculares, articulares, linfáticas y de fascia.
Usos mas comunes:
Inhibición y manejo del dolor: la cinta de kinesiología se puede usar para ayudar a disminuir el dolor y los espasmos musculares que pueden ocurrir después de una lesión.
Facilitación: estas cintas se pueden utilizar para ayudar a mejorar los patrones de activación y contracción muscular. Esto puede llevar a un tono muscular normalizado y también puede ayudar a mejorar el rendimiento deportivo.
Soporte y estabilidad: si tienes una afección que requiere que se mantenga una articulación específica en su lugar, el vendaje de kinesiología puede ser adecuado para ti (como, por ejemplo, inestabilidad o estrés en el hombro o la rodilla).
Control de la hinchazón: si has sufrido una lesión o te has sometido a una cirugía que provoca un aumento de la hinchazón, la cinta de kinesiología puede ayudar a disminuirla porque reduce la presión entre la piel y los tejidos subyacentes.
Manejo del tejido cicatricial: el tejido cicatricial puede limitar la movilidad en ciertas partes del cuerpo. La cinta de kinesiología se puede usar para tirar suavemente de dicho tejido proporcionando un estiramiento de baja intensidad y larga duración al colágeno apretado.
Las cintas kinesiológicas ofrecen estabilidad muscular y articular, mejorando la contracción y la circulación y puede usarse para tratar muchas patologías como: artritis, artrosis, ciática, escoliosis, esguinces, síndrome del túnel carpiano, dolor en la planta del pie, etc.
El vendaje neuromuscular es de gran ayuda para la función muscular ya que no limita los movimientos del paciente. Esa es la principal diferencia del kinesiotape con respecto a los vendajes tradicionales: no inmoviliza la zona del cuerpo lesionada y eso permite que se cure de una forma más natural.
Beneficios:
Los tapes kinesiológicos ofrecen estabilidad muscular y articular, mejorando la contracción y la circulación en el músculo debilitado, ya sea por lesión o por infrautilización.
Alivio del dolor: al elevar la piel, el primer efecto es la reducción de la presión en los receptores sensoriales subcutáneos.
Mejora de la movilidad: el kinesiotape es un vendaje que no inmoviliza la zona lesionada y eso permite una gran movilidad.
Estimulación de los músculos: favorece la capacidad de contracción de los músculos, aliviando el dolor y disminuyendo la fatiga.
Disminución de las inflamaciones y hematomas: el vendaje neuromuscular acelera el drenaje de la zona afectada, mejorando la circulación y favoreciendo la eliminación de líquidos.
Mejora en el proceso de rehabilitación de lesiones: el paciente puede seguir entrenando porque tiene movilidad de esa zona afectada, una situación mucho más favorable a la de inmovilización durante el tiempo de lesión.
Entrenamientos funcionales: en el caso de los deportistas y personas con actividad física activa, permite seguir haciendo entrenamientos funcionales para una correcta recuperación; ya que no limita los gestos.
Reeducación postural: ayuda a solucionar problemas derivados de malas posturas y a la vez hace que el paciente sea más consciente de su propio cuerpo, ayudando a mejorar la postura.
El vendaje neuromuscular también se puede usar como complemento de otro tipo de tratamientos de rehabilitación o estética. Por ejemplo, en las técnicas de drenaje linfático, si posteriormente se aplican tapes kinesiológicos en la zona, el drenaje será mucho mayor durante los siguientes días. Cuando tenemos una lesión muscular o en un ligamento y se interviene mediante terapias de masajes, la zona necesita una mayor circulación para eliminar los daños en el tejido, en primer lugar, y llevar los nutrientes que van a ayudar a regenerar la zona, en segundo lugar. Por ello, la elevación de la piel que produce el vendaje neuromuscular hace que mejore la circulación sanguínea en toda la zona tratada y fomenta el proceso de recuperación.
Su aplicación:
El éxito de un tratamiento con vendaje neuromuscular consiste en que las cintas kinesiológicas estén bien colocadas, y para ello hay que prestar especial atención a la hora de su aplicación.
Se debe comenzar preparando la piel de la zona a tratar, teniendo en cuenta que:
1.-Debe estar limpia y seca: no debe contener restos de sudoración o la utilización de cremas/aceites; ya que perjudica la adherencia del tape.
2.-Depilación: si es una zona en la que existe mucho vello corporal es recomendable depilarlo o rasurarlo antes de la colocación del tape ya que influye negativamente en la adherencia. Además de el malestar que este ocasionaría en la piel al ser retirado.
La colocación siempre debe ser realizada por un profesional, ya que previamente necesitamos un diagnóstico de la patología que sufrimos. Una vez aplicado, el vendaje neuromuscular dura varios días sobre la piel. Sin embargo, hay que tener en cuenta que es necesario esperar como mínimo 30 minutos después de su aplicación para ducharse o realizar ejercicio físico y a la vez se recomienda prestar atención a la zona donde se a colocado el vendaje, si se aplica por primera vez, en caso de presentar una reacción alérgica o similar al adherente, situación muy poco probable, pero necesario a tomar en cuenta.